Llevaba TODA la noche lloviendo, todaaa!!. No paraba. Pero, no se supone que una tormenta tropical dura un par de horas y ya está?? Pues parece que no, esto era como el diluvio universal!! Hicimos casi todo el camino con pasadas por agua, menos mal que cuando llegamos a Puerto Limon paró. Para ir a Tortuguero desde Puerto viejo tienes dos opciones: 1) la que hicimos, que fue llegar hasta Puerto Limón, allí coger un bus hasta Moan que es otro pueblin que esta a 13km desde donde salen las barcas a Tortuguero. (35 usd), precio indiscutible, nada de regateo. 2) opción mas barata, que es coger un bus hasta Guapiles, de allí otro hasta Cariari, y de allí otro hasta La Pavona, de donde sale la lancha que va a Tortuguero (ver horarios, porque solo salen tres al día).
El viaje por los canales fue bonito, vimos algún animalillo, y te va
preparando para lo que te espera en Tortuguero.
Al llegar allí, tuvimos
contacto de inmediato con el que fue nuestro GUÍA, y lo pongo en grande porque
fue el mejor que hemos tenido. ERNESTO, de Ernesto Tours. Jajaja, nos recomendó
las cabinas (habitaciones) más baratas para dormir y con el hicimos los dos
tours en el Parque. Uno por la mañana, en canoa, que nos llevo por los canales
pequeños donde no cruzan las motoras, y por la noche, el de las tortugas.
Ernesto fue un crack, de repente,
se cruzaba un canal de 50 metro porque había visto un lagarto en el otro lado de la jungla, o te decía, mira
allí, y tu, a donde, y el allí, allí, y tenías un caimán o una iguana de metro y
medio mirándote desde el tronco de un árbol, madre mía que vista tenía el tío!!
Nos estuvo contando cosas de los monos aulladores, de los tucanes de pico
arcoíris, de los cocodrilos y los caimanes, de murciélagos, serpientes y del
famoso jaguar, que se comía a los perros de la zona… Pero lo mejor estaba por
llegar y eso que no teníamos todas con nosotras para ir a ver a las tortugas!
Por la tarde comenzó de nuevo a llover, y no paraba, nuestros ánimos estaban
bajos porque caminar por la playa con lluvia, de noche y con los chubasqueros
le quitaba encanto a la expedición, afortunadamente la lluvia remitió y Ernesto
nos vino a buscar a las 20h, ya era noche cerrada.
La época del desove de las tortugas empieza en abril y dura
hasta septiembre pero tiene su apogeo durante los meses de julio y agosto donde
es imposible encontrar alojamiento en Tortuguero si no reservas con tiempo. Hay
tres tipos de tortugas, las más importantes eran la Laud (que es la tortuga más
grande del mundo) y las Verdes (algo más pequeñas). El plan era, entrar en el
bosque, de noche, claro... y avanzar por el sendero para salir a la milla 3 y desde allí
continuar por la playa. El parque tiene una playa de 5 millas que es donde está
permitido ver a las tortugas, teóricamente no se puede salir de ese límite, lo
que significa que si la tortuga no desova en ese tramo te quedas sin verlas…. Hay
guías que avanzan más y es ilegal....
Bueno, pues nada, como os dije, la noche
estaba cerrada, el cielo amenzaba con mas lluvia y Ernesto nos vinos a buscar.
Nos pusimos nuestras chanclas, los pantalones cortos con el bikini por si nos
mojábamos y el chubasquero. Empezamos a caminar adentrándonos en la espesura
del bosque, con nada más que mi frontal (Ernesto no quería usar su linterna de
luz roja porque no quería que se gastaran las pilas... joder!!). Está prohibido alumbrar a
las tortugas con luz blanca, por lo que en la playa sabíamos que tendríamos que
caminar a oscuras. Nuestro guía estaba entusiasmado buscándonos todos los
bichos posibles, de pronto, nos decía, aquí, aquí y enfocaba: una tarantula,
despúes decía aquí, y nos enseñaba una serpiente!! Vimos de todo! Murciélagos,
bichos palo, todo tipo de insectos, mas arañas…. Cada vez que parábamos miles
de hormiguillas subían por nuestros pies!! (genial, no!!). 
Finalmente llegamos
a la playa y mientras nos habituamos a ver en la oscuridad, Ernesto nos daba ánimos,
bueno, si no vemos a la tortuga al menos hemos visto muchos animalillos (mas
majo!!). Comenzamos a caminar por la playa, el agua estaba calentita y aunque
lloviznaba un poco, la temperatura era maravillosa. A oscuras se podía ver como
las olas transportaban el placton que se reflejaba en el agua con colores
fluorescentes y se metía entre nuestros pies en cada paso que dábamos por la
orilla, maravilloso!!. Después de caminar casi tres cuartos de hora, la tensión comenzó a aumentar, Ernesto se había desquitado de su aire relajado caribeño, y nervioso había levantado en un par de ocasiones su
linterna hacía siluetas en la arena que al final resultaron ser troncos secos.... de pronto nos dice que nos paremos. Nadia y yo contenemos la respiración!! Ernesto murmura en una voz muy suave apenas audible que hay un rastro que sale de la orilla, esta
delante nuestro, pero no vemos nada, la oscuridad nos abraza... Nos reúne a las dos alrededor suyo y con la voz, aun como un susurro, nos dice, chicas ese es el rastro que deja
una tortuga en la arena prestad atención - nosotras emocionadas- cruzad los dedos para que este ahí y no
haya llegado al bosque (los dedos no podía estar más cruzados), de repente
levanta la luz roja y vemos un bulto, que se mueve!!!! La tortuga!!!!! Madre
mia!! Nadia casi me destroza la mano de la emoción!! Nos acercamos con cuidado para no molestarla y vemos a un ejemplar de tortuga verde de metro y medio!!! Increibleeee, menudo
bicho!!! Que graciosa se movia!!! Fue un momento maravilloso!!! Los tres estabamos emocionamos!!!
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| Ron blanco Cacique de Costa Rica |
Para
celebrarlo, acabamos en la discotaberna del pueblo tomandonos unos cubatas a la
salud de nuestro guía! Olé, olé y olé!!!
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| ¡Celebrando a saltos que vimos la Tortuga! |
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